Cuál es la relación entre el sobrepeso y la infertilidad
La obesidad es una epidemia creciente que afecta a millones de personas en todo el mundo. La obesidad también afecta significativamente a la capacidad de la mujer para llevar a cabo un embarazo a término, así como la fertilidad del hombre.
De acuerdo a la web News Medical, la obesidad se define por un Índice de Masa Corporal (IMC) extraordinariamente alto, que refleja el contenido de grasa corporal. Alrededor de 1 de cada 4 mujeres tiene al menos sobrepeso, según encuestas y estudios. Los índices son más elevados entre las mujeres que tienen problemas de concepción.
Junto con otros problemas de salud sexual causados por la obesidad, la infertilidad es uno de los más importantes que conduce a la tendencia de necesitar técnicas de reproducción asistida.
Obesidad e infertilidad
Una de las conexiones mejor establecidas entre la obesidad y los problemas reproductivos es el vínculo entre la obesidad y la infertilidad. La obesidad disminuye las tasas de éxito del embarazo en los ciclos de concepción natural.
En las mujeres que se someten a terapias reproductivas, acelerando y aumentando sus ciclos de ovulación para tener más posibilidades de concebir, la obesidad puede reducir también las tasas de embarazo.
Los niveles altos de leptina y los niveles bajos de adiponectina también pueden reducir las tasas de concepción. La fertilidad se podría restablecer parcialmente si se establece un adecuado régimen de pérdida de peso.
Obesidad y anovulación
La obesidad puede provocar una resistencia a la insulina que está relacionada con la anovulación o la incapacidad de la mujer para producir el óvulo de cada ovario cada mes. Los niveles de insulina y la obesidad también provocan una alteración de las hormonas sexuales, un alto nivel de andrógenos (hormonas masculinas), altos niveles de factor de crecimiento libre 1, etc.
Según News Medical, diversos estudios demuestran que la infertilidad relacionada con la anovulación es un 30% mayor en las mujeres con un IMC entre 24 y 31 en comparación con las mujeres de peso normal. Además, en el caso de las mujeres con un IMC superior a 31, la probabilidad es incluso un 170% mayor.
Sólo un 5% de pérdida de peso corporal puede aumentar la tasa de ovulación y reducir las anomalías bioquímicas.
Los estudios muestran que, en las mujeres obesas con anovulación, la causa subyacente se debe probablemente al síndrome de ovario poliquístico (SOP). El SOP se asocia a la obesidad o al sobrepeso junto con síntomas de alta secreción de hormonas masculinas, como vellosidad, acné, alto nivel de colesterol y resistencia a la insulina.
Obesidad y embarazos complicados
La obesidad provoca complicaciones comunes en el embarazo, como la hipertensión inducida por el embarazo denominada preeclampsia o, en casos graves, eclampsia.
La obesidad y la resistencia a la insulina relacionada con ella también son responsables de la diabetes durante el embarazo o diabetes gestacional.
Obesidad y aborto espontáneo
La obesidad aumenta la tasa de abortos espontáneos y, por tanto, disminuye las tasas de éxito del embarazo entre las mujeres obesas. Esto puede deberse a varias causas, entre ellas:
- Mala calidad de los óvulos
- Implantación o recepción defectuosa del óvulo fecundado en el útero, principalmente debido a la resistencia a la insulina
- Niveles defectuosos y alterados de las hormonas que ayudan a mantener el embarazo
Obesidad y fracaso de las técnicas de reproducción asistida
La obesidad es responsable de las altas tasas de fracaso del embarazo, incluso después de emplear métodos artificiales como la estimulación de la ovulación y la concepción asistida.
La Sociedad Británica de Fertilidad recomienda que las mujeres obesas deben iniciar un programa de reducción de peso y las que tienen un sobrepeso severo (definido como un IMC de 36 o más) no deben recibir tratamiento hasta que su peso se haya reducido.
Obesidad y las hormonas
La obesidad provoca una disminución de la testosterona, la hormona estimulante del folículo, la inhibina B y la globulina fijadora de hormonas sexuales. Esto conduce a un bajo recuento y calidad de los espermatozoides en los hombres obesos.
En las mujeres obesas hay un aumento del metabolismo de los andrógenos y niveles elevados de estrógenos. Los hombres obesos también muestran niveles bajos de estrógenos y testosterona.
Hombres obesos e infertilidad
La obesidad no afecta únicamente a la fertilidad de las mujeres. Recientemente, estudios realizados por el Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental (NIEHS) de EE.UU. confirman que los hombres con índices de masa corporal (IMC) elevados tienen muchas más probabilidades de ser infértiles que los de peso normal. Los datos del NIEHS sugieren que un aumento de 9 kilos en el peso de un hombre puede aumentar la probabilidad de infertilidad en aproximadamente un 10 por ciento.
Las irregularidades hormonales en los hombres afectan a la estimulación de los testículos que inhiben la producción de esperma. El exceso de grasa hace que la hormona masculina, la testosterona, se convierta en estrógeno, y esos estrógenos disminuyen la estimulación testicular.
De acuerdo a Honor Health, los investigadores de Reproductive Biology Associates identificaron que un IMC elevado en los hombres se correlaciona con niveles reducidos de testosterona. El estudio demostró que los hombres con sobrepeso tienen niveles de testosterona un 24 por ciento más bajos que los hombres de peso normal, y que los hombres obesos tienen niveles un 26 por ciento más bajos. Los hombres con un IMC elevado suelen tener también un análisis de semen anormal.
Mantener el peso
Incluso cuando es leve, la obesidad aumenta considerablemente los malos resultados del embarazo. Muchas pacientes intentan seguir el consejo de sus médicos y perder peso antes de quedarse embarazadas. Sin embargo, cuando una persona tiene un sobrepeso de 45 kilos o más, los plazos necesarios para perder una cantidad de peso tan importante y el temor a que vuelva a aparecer con el embarazo son, en el mejor de los casos, desalentadores.
Muchas personas infértiles, especialmente las mujeres, recurren a las opciones de la cirugía de pérdida de peso para ayudarles a reducir su peso, y darles una herramienta para usar junto con las habilidades recién aprendidas para mantener el peso.
La obesidad es un importante problema de salud asociado a la infertilidad y a muchas otras enfermedades relacionadas. Los estudios demuestran que la pérdida de peso es extremadamente valiosa en el tratamiento de estos pacientes, puede mejorar la fertilidad y conducir a embarazos a término con éxito.
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